martes, 7 de agosto de 2012

Feeling so Bohemian Like You

A lo mejor ustedes nunca ha tenido ganas de tirar toda su ropa y resdescubrir una etapa que no vivieron pero a mí me acaba de pasar con lo bohemio mientras estaba tomando un curso en el que me requerían verme presentable (léase, no usar mi uniforme de camisetas, jeans y tenis todos los días).
Fue una experiencia fabulosa y en sí no tuve conflictos de identidad con el código formal pero la falta de costumbre hacía que la corbata me asfixiara, los zapatos (un par de oxfords negros que compré para mi titulación) me cansaban y el ajuste de un traje verde que me heredaron me obligaba a adoptar posturas un poco incómodas, entonces terminaba un poco agobiado por el vestuario.
Y me encontré de repente deseando usar sandalias, un pantalón amplio de lino y una guayabera que me regaló Adrián de Looks for Love.
Nunca fui hippie. Lo juro. Ni en mis épocas de mayor rebeldía adolescente pensé en tocar la guitarra, usar collares con chalecos de cuero y gorros rastafaris. Simplemente no era lo mío y he tenido muy buenos amigos pasados y presentes que gustan (o gustaron) de toda esa onda pero jamás me llamó la atención.
Lo que sí me ha parecido fascinante desde hace un tiempo es el estilo marroquí. Desde la casa de Paloma Picasso hasta la decadencia que vivieron Talitha Getty y su marido ultramillonario se han convertido en referentes de un lugar al que debo ir lo antes posible.
Y como un hilo suelto en un tejido, se fueron desencadenando varias ideas sobre vestirme como varios tipos de bohemio que han existido. Pero no me refiero al boho chic de hace unos años, olviden a Jude Law y Sienna Miller caminando por Londres de la mano como si recién llegaran de Woodstock.
Ahora mismo tienen una imagen mental del bohemianism que se ha popularizado, pero ese concepto ha cambiado con el paso de los años. En el siglo XIX eran señores de pelo largo y reacciones un poco dramáticas, luego llegaron los fans del Lejano Oriente y después gente como Klimt se inventó una bohemia en plena época de corsets y encajes. Supongo que parte de la herencia cultural de los 60 es esa imagen mental que les señalé.
Y se me ocurrió dividir mis estilos favoritos en cinco etapas, empezando por lo más obvio y moviéndome a otras situaciones que me han intrigado y forman parte del concepto que quiero abrazar en estos días.
1.- Marrakesh Express
Me parece el más extremo y difícil de imitar, porque muchas de las cosas que necesitaría están del otro lado del mundo, pero me sentiría muy contento caminando por ahí vestido con algo ultra cómodo y acorde con mi fase marroquí.
No conozco muchas personas que anden por ahí inspiradas en Marruecos, así que me basaría en los Getty, quienes la pasaron maravillosamente en el Marrakesh de los 60.
 
-Una djellaba (caftán para hombre): Esto es muy extremo para muchas personas que andan por la vida con jeans y camisetas, pero son muy cómodos y se ven lindos (así que por favor, luchen por que no se usen con leggings o versiones obscenamente cortas y demás atrocidades).
Tuvieron su momento en 2007 pero es muy raro que un hombre los traiga, aunque en Marruecos son tradicionales (el nombre correcto es djellaba y es muchísimo más sobrio que los caftanes que conocemos. Quiero uno de esos).
-O una túnica: Esto es menos extremo y más fácil de localizar
-Unos pantalones de lino: para combinar con la djellaba o la túnica
-Unas sandalias: Las babuchas son muy lindas (hay una tienda en Polanco que las vende) pero mis pies no están diseñados para zapatos muy planos, así que no las aguantaría. Unas sandalias me harían caminar mejor.
-Un bolso mensajero de piel
2.- Hippie comeflores mexicoamericano (que a su vez es medio hipster)
Hubo una explosión el otoño pasado de estampados Navajo, sobre todo en Proenza Schouler, pero la idea de plumas, trenzas y pintura facial es un poco extrema para mí, así que se me ocurrió combinarla con influencias del sureste mexicano, ésas que tanto han fascinado a Matthew Williamson y a Sophie Arbou de Paul & Joe (Por cierto, vino Matthew a Elle México Diseña y en ningún momento leí o vi que le preguntaran sobre su fascinación con Chiapas y Yucatán, ¿eh? Muy mal).
Cuando iba a la universidad veía muchos estudiantes, maestros y demás vestidos de este modo; El problema es que lo sobrecargaban y terminaban viéndose más como una curiosidad que como un homenaje al folclor.
No me malinterpreten, me gusta mucho la ropa mexicana y admiro que estén haciendo de eso una postura de orgullo a nuestras tradiciones (del mismo modo en que Dolores Olmedo lo hizo durante toda su vida), pero éste es el giro que yo le daría a ese estilo.
-Una guayabera: Es una de las prendas más cómodas y elegantes que puede haber y de inmediato puede mejorar un atuendo. Si algo es aceptado para una boda de verano, se puede usar con casi todo.
-O una camisa bordada: Más informal pero también muy cómoda. Acá se debe manejar con cuidado porque existen algunos modelos de gusto cuestionable.
-Un pantalón de lino
-O jeans, para balancear el atuendo.
-Una larga bufanda roja (para usarla como cinturón)
-O un cinturón de cuero trenzado y motivos geométricos: sigue siendo hippie comeflores y se puede usar sin que los demás componentes del atuendo compitan con él.
-Sandalias de Oaxaca: son imprescindibles. Me compré unas cuando fui hace un par de años y lo único malo que les encontré es que el acabado me cortaba los talones, pero lo pude solucionar y desde entonces no las suelto en tiempo de calor
-Unos mocasines Minnetonka: llegaron a mis manos unos preciosos, forrados en piel de conejo y con bordados, pero los tuve que donar porque eran de bebé.
-Un bolso mensajero con muchos flecos: Los flecos son una trampa estilística, porque es muy sencillo que se salgan de control y te hagan parecer ranchero de Montana (por eso las chamarras del oeste son un faux pas épico, a menos que las use alguien como Sienna Miller o el cantante de The Killers). Pero una hilera discreta en un accesorio los hace ver bien.
-...O un bolso mensajero beige o de mezclilla: yo tuve uno y funcionaba bastante bien con casi todo. Si es beige tiene la ventaja de no ser demasiado literal.
-Una bufanda, estampada o no, de flecos: Son un toque muy discreto por si no quieres tomar riesgos
-Si refresca, un viejo abrigo del ejército, debidamente alterado: El problema más grande con lo vintage son las tallas, seguido de las condiciones de la ropa. Pero si se manda a un sastre, se le quitan todas las insignias y se pinta de nuevo, va bastante bien con la idea y resguarda contra frío y lluvia.
-o un cardigan de alpaca sin estampados: son muy lindos pero la lana pica tremendamente. Suerte con ella.
Y como plus, un atrapasueños en un collar, de tamaño discreto y con un par de plumas.
3.- Sur de Francia: Éste es sencillo y ya lo he imitado más de una vez, sobre todo en primavera, cuando la ciudad es deliciosa para ir caminando por ahí con toda la frescura que te puede dar un atuendo inspirado en las vacaciones en la Riviera Francesa.
bohemian chic for men
¿En quién me inspiro? No les podría decir "Alain Delon en Cannes" porque nunca he visto una película suya, así que me iré con esa imagen pop del hombre despreocupado que pasa de la ostentación de los yates y se va caminando a todos lados aprovechando el sol y el buen clima que suelen darse en la Provenza y la Côte d'Azur.
-Una camisa azul claro, de manga corta
-Unos pantalones beige
-Alpargatas: me trajeron unas de España y debo decir que son unos de los zapatos más cómodos que he usado. Son suaves y dejan que el pie respire, entonces no me cansaré de usarlos mientras haga calor.
 
-Unos lentes de sol clásicos: en mi caso, tengo unos Ray Ban de los 60 o 70 que encontré en un cajón y no suelto en los días de calor.
 
-Una fedora de paja: compré una en Oaxaca y vivimos muy felices durante varios meses, hasta que una mañana el viento me la arrebató y la fue a colocar directamente bajo las ruedas del Metrobus.
-Si refresca, un suéter de rayas marineras. Ahora que ya no están de moda pueden usarse sin problemas.
Como plus, una fragancia cítrica (hay una con notas de toronja de Hermès que me fascina, me parece que se llama Pamplemousse), una bicicleta, una réflex viejita y una cajetilla de cigarros sin filtro. Y, por supuesto, una playlist con bossa nova y Michel Legrand.
4.- Bloomsbury meets Swinging London
¿Qué puedo decir de Mick Jagger que no se haya dicho antes? Rompió todas las reglas posibles de su tiempo viéndose impecable y eso ya es un logro per se. Él y sus amigos (Brian Jones, Keith Richards, Hendrix, David Bailey y demás) siguen siendo referente para los fans del rock.
Pero Inglaterra también adora a los bohemios y excéntricos, tanto que los prerrafaelistas (los hippies del siglo XIX) nacieron ahí, y se desarrollaron grupos como Bloomsbury, en el cual estuvieron Virginia Woolf y otros grandes personajes, entonces se me ocurrió mezclar un poco ambas ideas. Es un estilo que han seguido los chicos de Etro durante muchas temporadas y les funciona.
Hace tiempo vi una editorial de Vogue con Dhani Harrison (hijo de George) y Sasha Pivovarova y se volvió una de mis referencias favoritas para el look de hippie burgués en invierno.
-Un traje de terciopelo: No hay nadie que pudiera usarlo mejor que Jagger pero aún ahora, y aunque no lo recomiende GQ, se puede usar junto o por separado con los accesorios correctos. Yo buscaría un corte ajustado y me olvidaría de esas horribles camisas de escarolas que utilizaban en la época. Las chicas se ven mejor con ellas.
-Una bufanda con estampado paisley: Tengo que admitir que no es mi estampado favorito pero fue el favorito de los chicos de entonces, así que un poco no quedaría mal en un atuendo
-Una camisa morada o con detalles interesantes: La gran ventaja de Jagger sobre otras personas de su tiempo es que conocía su cuerpo a la perfección, y esto le daba pie a experimentar con lo que quisiera sin olvidar su complexión. Las camisas de colores y con puños contrastantes le iban fantásicamente y tomaría eso de él para mi atuendo ideal.
-Un abrigo de lana de Mongolia: Los Stones tuvieron un momento de usar pieles y en general son las favoritas de los bohemios, lo cual no es muy eco-friendly que digamos.
Sin embargo, la lana de Mongolia parece ser más amigable para los que odian las pieles de animales y un abrigo de estos es una de las prendas más fascinantes y calientitas que se pueden encontrar.  Una vez encontré uno de estos abrigos en un bazar, pero costaba 8 mil pesos y le daba la vuelta varias veces a mi presupuesto.
-Un abrigo de tweed: Es muy de me voy a cazar zorros al campo pero funciona maravillosamente con casi todo el atuendo. Además, el tweed es una maravilla: no es en absoluto delicado, protege contra el frío
-Un delgadísimo suéter de cashmere con estampado de rombos: sólo porque me gusta el cashmere.
-Una casaca militar: No hay nadie mejor que Hendrix para usar una casaca y hacerla ver increíble con jeans negros y una camisa (aunque el estilismo de Kanye me gusta). El problema es encontrar una.
-Unos pantalones estampados con cuadros: Los hombres de Bloomsbury se vestían de un modo que parece conservador para nosotros pero entonces era muy fresco. Esa idea de mezclar estampados, arremangarse las camisas y usar pantalones anchísimos tuvo su impacto en los años 20.
En este caso, usaría el grooming de Bloomsbury para este concepto. Se les veía despeinados, con una ligera barba y una pipa en la boca
-Un trench coat: Nada más por no perder la costumbre
-Unas Chelsea boots: Tom Ford y los Beatles las adoran. Parecen ser muy cómodas y van mejor con el atuendo que los oxfords (de los cuales no quiero saber en un rato, gracias)
-O unas botas de montar: Éstas serían un gran reto para mí porque nunca en mi vida he usado botas y no sé si las aguante, pero estaría dispuesto a probar.
5.- Beatexistentialism
Todos fantaseamos con tomarnos un café en París pero a mí me gustaría imitar el estilo tan simplista y despreocupado que tenían los amigos de Sartre y Juliette Gréco en la posguerra. Pasaban tanto de la moda que terminaron imponiendo una con toda la austeridad de su estilo y la importancia que daban a la inteligencia más que a la belleza. Puede que este invierno termine vistiéndome así.
cafe society - Paris, Ile-de-France
En el otro extremo están los beats, con sus escritores que se vestían con lo primero que encontraban tanto para escuchar jazz como para viajar en una camioneta destartalada de punta a punta de Estados Unidos.
-Un suéter negro de cuello de tortuga: me heredaron varios de estos cuando era adolescente y debo decir que son muy cómodos. Acabo de ver una versión de cashmere que robó mi corazón pero no estoy listo para llevarlo a la tintorería cada semana.
-Unos pantalones negros: básicos en cualquier guardarropa, sea bohemio o no.
-Un trench coat
-Mocasines negros, sin calcetines : será un poco difícil pues los zapatos de cuero llegan a rozar los pies pero en nombre de la coherencia del atuendo lo intentaré.
-Una camisa de cuadros: Si me preguntan qué  usaba un beatnik en mi mente respondería sin dudar que una de esas. De hecho estamos hablando de un grupo tremendamente funcional, que trabajaban en lo que encontraban y no tenían mucho tiempo (ni dinero) para ir de tiendas. Entonces, esto era mucho más utilitario que una camisa blanca.
-Unos pantalones de pana: En mi adolescencia tuve un par y me sorprendía lo resistentes que son. Aguantan el frío, los raspones y se cuidan solos. No son mis favoritos pero podría usarlos en un día de mucho frío.
-Un satchel negro: Es una necesidad para mí porque no puedo seguir yendo a entrevistas de trabajo con bolsas de tela. Y queda bien con todo. Y ya, con esto acaban mis atuendos deseados.

¿Qué les parecen todas estas opciones?




2 comentarios:

Botica Pop dijo...

Amo los pantalones de lino bien usados. Susurran elegantemente "yo no tengo que trabajar" y ¿hay algo más bohemio que eso?

Enrike LX dijo...

Con el calor que hace donde vivo,el bohemian chic es una de las mejores opciones para lucir, aunque personalmente no me gusta y odio vivir en clima costero, hay personas a las que les sienta muy bien...las sandalias trenzadas son un must para el verano en las mujeres y en los hombres la verdad me parecen un poco desagradables...en cambio los mocasines r'2die4....